

La figura de Alejandro Magno es una de las más carismáticas y relevantes de la historia universal por esa mezcla de magnanimidad y crueldad que le caracterizaba y por la grandeza de sus campañas que hicieron que en su breve vida unificara Grecia, conquistara Persia y Egipto y llevara su campaña más allá del río Indo. Educado militarmente por Leónidas el espartano y filosóficamente por Aristóteles, el emperador macedonio era capaz de tener una tolerancia impropia de la época con los habitantes de los terrenos conquistados y de reducir a escombros las ciudades de Tebas o Persépolis; capaz de mostrar bondad con la familia de Darío III y de asesinar a su amigo Clito en una fiesta porque este se resistía a considerar a Alejandro como un dios.
Ficha técnica