¡Devuélveme mis legiones!

En el año 9 d.C. las legiones XVII, XVIII y XIX del ejército romano del Rin desaparecieron como si se las hubiera tragado la tierra. Pero no fue la tierra quien se las tragó, sino los impenetrables bosque de Germania. Sobre aquella alfombra verde quedaron tendidos los cuerpos de cerca de veinte mil soldados de Roma, incluido el de su comandante en jefe. Los responsables fueron los queruscos de Arminio, un antiguo aliado de los romanos, que condujo al ejército de Publio Quintilio Varo a una masacre como nunca antes había sufrido el Imperio Romano.

José Manuel García Torres ha puesto sus considerables capacidades narrativas al servicio de una historia que si ya de por sí es lo suficientemente atractiva, tras pasar por su pluma se vuelve sencillamente apasionante. Los diálogos —magistralmente resueltos—, las detalladas descripciones del terreno, la dramática narración de los combates, logran transportarnos a aquella época y a aquellas regiones para asistir en primera fila a la más impactante derrota infligida a las legiones romanas en toda su historia. No tendrá el interesado en esta época de la Historia muchas oportunidades de disfrutar en español de una novela tan bien armada, tan bien documentada.